jueves, 23 de octubre de 2008

Agonia de noche blanca 19/12/01 11:00 am

El odio de Dios en sus manos tocó la debilidad de mi mente
la fragilidad que habitó en mi corazón murió así de repente
sus letras me hieren (puñal sin valor), las piedras de su indiferencia
lapidan mi esencia, desgarran mi amor
menguando el calor en tu ausencia
cual cenizas que punzan y avivan mi dolor
cual ríos de penas refluyen a mi
entre estas manos estuviste tu, estas manos aun esperan por ti
…sueños sin fin, reflejo de mi ser
su hipocresía batalló mi verdad!!
de manos al cielo imploro perdón
EL ODIO DE DIOS EN MIS OJOS VERÁS
…cada latido clamara piedad, morir no será suficiente,
susurro las culpas, él ya no oirá más,
viviré así por siempre....

1 comentario:

Daniela La Madrid dijo...

A veces la indiferencia te hace reflexionar y ver las cosas de otro modo. Gracias por los comentarios. Cuidese :)